Pasar de un periodo prolongado de inactividad a querer recuperar la forma, puede ser posible si sigues unas pautas de ejercicio responsable, como las que te vamos a sugerir a continuación.
Si te has descuidado tu actividad física durante un largo periodo, debes saber que es posible conseguir tus objetivos habituales, pese a que hayas estado inactivo durante meses. Son muchas las personas que se plantean la necesidad de hacer ejercicio para mejorar su salud y condición física, pero con el paso del tiempo ven cómo se distancian de sus objetivos, en muchos casos por falta de planificación. Como en todos los retos, la motivación es muy importante y, en este caso concreto, puede marcar la diferencia entre tener éxito y acabar con la sensación de que todo el esfuerzo ha sido inútil. A continuación, te explicamos, cómo es posible retomar el ejercicio de manera responsable.
Saber cuándo es necesario retomar el ejercicio
En función del tiempo que lleves sin realizar ninguna actividad física, el cuerpo nos enviará señales de mayor o menor intensidad. La sensación de que el cuerpo se “oxida” llega con una reducción de la capacidad cardiovascular, generando la sensación de que cuesta más esfuerzo realizar las actividades cotidianas, o con aumentos de la frecuencia cardíaca inesperados ante esfuerzos ligeros. Además, la musculatura pierde la fuerza y reduce su tono considerablemente.
Inicio suave y progresión gradual
Una vez que hayas decido que es necesario retomar la práctica de ejercicio, lo mejor es contar con el asesoramiento de un profesional que te ayude a definir unos objetivos alcanzables y te indique qué es necesario para ello. A partir de ahí, el trabajo constante será fundamental. Hay que matizar que no le costará el mismo tiempo volver a estar en forma, a quien tenía actividad física habitual y después realizó un parón, que a quien no practicaba ningún tipo de deporte.
Ponerse en forma, cuestión de tiempo
Por lo general, con 30 minutos de actividad intensa al día será suficiente para notar cambios a nivel físico y psicológico. Cuando alcances un mes de trabajo, comenzarás a ver los resultados de tu esfuerzo diario, aunque es verdad que no todos los cuerpos son iguales y puede haber diferencias en este tiempo entre unos y otros. La dieta será un factor fundamental para que estos cambios lleguen con mayor o menor brevedad, pues dependerá también de que sigas una alimentación adecuada o no.
Ejercicio y alimentación, son claves para logar ponerse en forma, siendo aconsejable la ayuda de un profesional que guíe la actividad a realizar, para así lograr que los resultados no se conviertan en algo inalcanzable, generando el deseo de abandonar.