Trata de dormir bien la noche anterior a la entrevista para afrontarla con todos tus sentidos alerta y dedica tiempo a acicalarte: la primera impresión es la visual, y no resulta baladí. Vístete en función del puesto al que aspiras (no es lo mismo un encuentro formal que una entrevista informal para, por ejemplo, un puesto de camarero).
Muchos recomiendan ser atrevido: añadir un punto exótico o llamativo a tu atuendo para destacar y que se acuerden de ti: una corbata si eres mujer, una camisa brillante bajo la americana si eres hombre.
Nuestro consejo es justamente el contrario. ¿Recuerdas las película «Men in black»?… Mejor pasa completamente desapercibido, pues nunca conoces los gustos de la persona que te va a entrevistar.
A priori te recomendamos no llevar nada que pueda causar rechazo.